Fernando de Berrío nació en Berja en 1577, hijo del también conquistador Antonio de Berrío y de María de Oruña, sobrina del adelantado Gonzalo Jiménez de Quesada. La familia se trasladó al Nuevo Mundo en 1580, asentándose en Tunja y Chita (actual Colombia).
A la muerte de su padre heredó la gobernación de Trinidad y Guayana, desde donde organizó más de veinte expediciones en busca del mítico Reino de El Dorado. Compitió en esta empresa con otros exploradores como Sir Walter Raleigh, en un contexto de rivalidad entre España e Inglaterra por el control del Caribe y la cuenca del Orinoco.
Aunque nunca halló El Dorado, sus exploraciones le llevaron a internarse en territorios desconocidos de la actual Venezuela y Guayana. Según la tradición, fue el primer europeo en contemplar el Salto del Ángel, la cascada más alta del mundo.
En 1619 fue nombrado gobernador y capitán general de Trinidad y Guayana, cargo que desempeñó hasta 1622, año en que murió en Argel tras ser capturado por corsarios.